martes, 22 de mayo de 2012

Nerviosismo en Washington ante posible ataque de Israel contra Irán



14:2 Porque yo reuniré a todas las naciones para combatir contra Jerusalén; y la ciudad será tomada, 
APOCALIPSIS:
16: 14 ….y van a los reyes de la tierra en todo el mundo, para reunirlos a la batalla de aquel gran día del Dios Todopoderoso. 16:16 Y los reunió en el lugar que en hebreo se llama Armagedón.

WASHINGTON — El programa nuclear iraní provoca nerviosismo y controversias en Washington, donde el gobierno admite no conocer todos los detalles sobre ese tema, mientras que Israel evoca una posible operación militar contra Teherán en pleno año electoral en Estados Unidos.
El presidente Barack Obama intervino en este debate que agita al gobierno, grupos de reflexión y medios de comunicación, asegurando que no pensaba que Israel haya tomado la decisión de atacar las instalaciones nucleares iraníes subterráneas que el Estado hebreo considera una amenaza a su seguridad.
En la cadena NBC, el presidente repitió el domingo que gracias a su gobierno, las sanciones económicas "sin precedentes" pusieron "bajo presión" a Teherán.
También afirmó qwue su país tenía un "buen conocimiento" del estado del programa nuclear iraní y que se está preparando desde hace tiempo para una eventual operación militar si fuera necesaria.


"Es complicado saber quién toma las decisiones en un momento dado" en Irán, opinó Obama, quien resumió las dificultades de su administración frente al tema.
Las especulaciones sobre un posible ataque se multiplicaron después de que un especialista israelí de inteligencia, Ronen Bergman, afirmara hace una semana en The New York Times que semejante ataque tendría lugar este año.
Por su parte, el ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, también habló de una operación contra Irán, aunque no precisó una fecha. "Quien diga 'más tarde' podría descubrir que 'más tarde' es demasiado tarde", afirmó.
Un editorial de The Washington Post sostenía el jueves que el secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, estimaba que existía una "gran posibilidad" de que Israel realizara una intervención militar en la primavera boreal contra las instalaciones nucleares iraníes.
Algunos observadores piensan que Israel simplemente alardea con el uso de la fuerza, ya que no lanzó esas advertencias previas antes de realizar los ataques contra Siria (2007) o Irak (en 1981). Eventuales represalias del Hezbolá libanés o Hamas en caso de ataque contra Irán también son consideradas por las autoridades israelíes.
Medios israelíes aseguraban este lunes que el primer ministro Benjamin Netanyahu ordenó a altos funcionarios de Defensa que dejaran de "parlotear" sobre el asunto.
A pesar de que no tiene decidido actuar, Israel podría utilizar sus amenazantes declaraciones para ejercer más presión sobre Teherán, estiman esos expertos.
"Israel exhorta de hecho al Congreso y al presidente a aprobar más sanciones y a aplicar lo más rápido posible las ya promulgadas" por Obama, afirma Cliff Kupchan, especialista en temas iraníes en el Eurasia Group.
De hecho, Obama firmó este lunes un decreto reforzando nuevamente las sanciones contra Irán, en particular bloqueando "todo bien o participación en activos del gobierno iraní" en Estados Unidos.
Este decreto afecta principalmente al sector financiero iraní, incluido el banco central y "toda institución financiera" en el país y hace entrar en vigor sanciones ya previstas en la ley de financiación del Pentágono promulgada el 31 de diciembre.
Según Trita Parsi, las señales que envía Israel podrían ser útiles para Washington en la medida en que ayudarían a persuadir a Irán de no militarizar su programa nuclear.
Pero "la administración (estadounidense) sabe que hay engranajes que no controla", agrega este autor de un libro sobre la política iraní del presidente Obama.
El presidente demócrata, que aspira a un segundo mandato en noviembre y cuyas relaciones con Netanyahu son notoriamente difíciles, tiene motivos para temer una crisis abierta entre Israel e Irán.
En ese caso Obama, quien se ufana de haber puesto fin al despliegue de tropas estadounidenses en Irak e intenta hacer lo propio en Afganistán, se vería sumergido en un enésimo conflicto en Medio Oriente.
Una guerra con Irán provocaría con toda seguridad una explosión de los precios del petróleo, con el consiguiente riesgo de reducir a la nada la recuperación económica que tanto necesita Obama para mejorar sus posibilidades electorales. Además, desde el inicio de la campaña, ha sido atacado por los precandidatos republicanos por la supuesta falta de apoyo a Israel.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por su comentario